Gracias Turing

Blog Personal de Julio C. Pastor
, in 24 October 2020

Turing

Ningún niño debería vivir mas que su mascota, Bart simpson.

Esto es un intento para desahogarme y agradecer al destino por ponerlo en mi camino.

Me llego un diciembre, quesque segun tenia 5 meses y cuando lo agarre podriamos decir que senti que me abrazaba, era un perrito muy miedoso, resultaba ser que lo habian regalado dos veces y yo era la tercer familia y pues no lo rechace.

Debo admitir que tuve miedo, porque apenas llevaba un semestre en la universidad y pues como rayos lo iba a mantener, no trabajaba o como lo iba a cuidar? Ni tiempo tenia y, lo más importante, que voy a hacer cuando se enferme? tuve mucho miedo pero ya estaba en mis manos y con todos esos miedos logramos cruzar la universidad juntos.

Era un cocker, chiquito, orejon y muy ojon,dosil y muy tierno, en resumen, facilmente robable.

Mis amigos de la universidad lo conocieron, cuando se fue de la casa y estuvo extraviado por casi 1 mes mis vecinos y los de la colonia seguro también lo conocieron,

Casi lo pierdo al año que me llego, le dio moquillo, me puse muy triste y me dio coraje pues ni un perro puedo cuidar? Afortunadamente la libro, con secuela y todo pero la libro.

No tenia esos habitos de sacar a la mascota a correr, pero con Turing lo intenamos, Turing fue un corredor nato.

fueron varias aventuras desde huir de manada de perros hasta correr y evitar que nos atropellara algún coche al cruzar la carretra del periferico (en ese tiempo no habia otra forma de llegar al carril para correr como ahora).

Tuve fiestas universitarias y ahi estaba turing, no era el alma de las fiestas pero obvio todos lo querian porque pues se dejaba querer.

Cuando termine la universidad tenia el sueño de que quizás nos tocaria movernos para otro lugar, tocaria llevarmelo y pues hacer otra aventura.

La supimos llevar con lo que tuvimos a la mano, hoy en todo el dia la tristeza pega, porque siento que le debi mucho, porque me falto tiempo para estar con el, porque llego a mi vida y mi primera impresión fue verlo como una carga y al final, sin darme cuenta, resulto ser quizas el apoyo que necesitaba para seguir adelante y que por supuesto ahora extraño.

Tengo recuerdo de la infancia donde estoy yo sin saber que hacer o a quien pedir ayuda ante un perro moribundo, esta escena se replica pero olvide que en esta ocasión tengo a quien pedir ayuda y bueno, me falto pedir ayudar para quizas lograr salvar a Turing.

Y pues gracias Turing, por tolerarme cuando llegaba estresado por tonterias de la universidad, cuando llegue todo deprimido porque no funciono mi relación, cuando llegue todo desilusionado porque no se concreto el proyecto o cuando te deje con mamá por casi un mes y cuando regrese me abrazaste con tus patitas porque, quiero pensar, me extrañaste y yo sin poderlo notar.

Basicamente, gracias por estar siempre ahí y perdón porque seguramente te fallé.

Hoy a modo de ceremonia postuma, cene junto Boby y aunque intentamos ser los fuertes, te extrañamos un chingo.